Sustitución de microagresiones por microinclusiones
¿Alguna vez dijo o escuchó un comentario en el lugar de trabajo que parecía inofensivo o incluso, para usted, se sintió como un cumplido?
Considere estos comentarios o acciones, ¿de qué cree que son ejemplos?
- Un joven le preguntó en broma a su colega senior: “¿Sabes qué es Instagram?
- Una persona usa el término “gay” para describir una película que no le gustó.
- Una mujer que conduce se da cuenta de que un hombre negro cruza la calle frente a su automóvil y, de repente, revisa y cierra las puertas de su automóvil.
Estas se denominan microagresiones y contienen mensajes ocultos degradantes que a menudo se derivan de prejuicios inconscientes.
¿Qué son las microagresiones?
Si bien la palabra microagresión ha existido desde la década de 1970, la mayoría de las personas no la han escuchado o no tienen claro lo que significa. Según Psychology Today:
Las microagresiones son los desaires, desaires o insultos verbales, no verbales y ambientales cotidianos, ya sean intencionales o no, que comunican mensajes hostiles, despectivos o negativos a las personas objetivo basándose únicamente en su pertenencia a un grupo marginado.
Una de las partes más importantes de esta definición son las palabras intencional o no intencional.
Insultar intencionalmente a alguien porque es miembro de un grupo generalmente se define mejor como discriminación y prejuicio absolutos. La mayoría de las veces, la persona que comete la microagresión no ve el daño en su acción, no es intencional, incluso podría pensar que estaba halagando a la persona y sorprenderse si la persona reacciona negativamente.
Como sugiere el nombre, las microagresiones parecen pequeñas; pero agravados con el tiempo, pueden tener un impacto dañino en la persona o el empleado. Las microagresiones pueden crear estrés, pérdida de productividad, problemas emocionales y problemas físicos para el objetivo.
Los psicólogos a menudo comparan las microagresiones con la “muerte por mil cortes”. Esta metáfora se encuentra comúnmente en muchos estudios sobre el tema. Si se pregunta por qué esto es tan importante, piense en esa frase, muerte por mil cortes, ¿y si esa microagresión fuera un corte de papel? Un pequeño corte con papel no causa demasiado dolor, ¿verdad? No es gran cosa. Ahora imagine ese mismo corte de papel pero multiplicado por 10 o 100… rápidamente se vuelve doloroso.
Los psicólogos a menudo comparan las microagresiones con la “muerte por mil cortes”.
Puede pensar que estos pequeños comentarios no le molestan, pero tal vez sea porque rara vez los experimenta. Recuerde, nuestra definición incluye la idea de que las microagresiones ocurren más a personas en grupos marginados. Si la persona marginada siempre recibe cortes de papel, esos pequeños cortes de papel aparentemente inofensivos (también conocidos como insultos) pronto se convertirán en demasiados.
Un antídoto contra las microagresiones son las microinclusiones. Como sugiere la palabra, las microinclusiones son pequeños actos que tienen un gran impacto para que alguien se sienta incluido.
Dado lo comunes que son las microagresiones y el daño que causan, ¿cómo puede ayudar a detenerlas? A continuación, ofreceremos consejos; ya seas un espectador, el agresor o el objetivo, todos cometemos un desliz. Incluso aquellos de nosotros con las mejores intenciones podemos cometer microagresiones sin darnos cuenta. Creemos que estamos siendo amables con alguien, teniendo una pequeña charla o incluso siendo graciosos.
Considere sus palabras
Si alguna vez alguien te acusa de una microagresión, un insulto, un comentario desagradable o una broma inapropiada, intenta hacer lo siguiente:
- Escuche con una mente abierta
- Evitar la actitud defensiva
- Disculparse
- Aprende de la experiencia
- Reflexione sobre el origen de la microagresión y cómo puede evitar errores similares en el futuro.
La próxima vez, en lugar de hacer que alguien sienta que no pertenece, crea una microinclusión y haz que se sienta bienvenido e incluido.
Si eres un espectador y eres testigo de microagresiones. Hay dos cosas que potencialmente puede hacer para ayudar.
Las microagresiones a menudo no están claras. Es probable que la persona no pretendiera hacer daño. Si alguien dirige una microagresión hacia ti, hay algunas cosas que tal vez quieras hacer.
Estrategia 1: elige tus batallas
Un profesor de la universidad John Jay escribió un artículo sobre microagresiones y se le ocurrieron cinco preguntas que el objetivo debería hacerse al decidir si responder a una microagresión:
Este proceso puede parecer injusto. Aún así, debe decidir si vale la pena una respuesta.
Estrategia 2: Esté preparado con tácticas de respuesta
Si decide que la microagresión merece una respuesta, practicar qué decir o cómo responder le ayudará:
- Pregunta para aclarar
- Intención separada del impacto
- Comparte tu propio proceso
Asegúrese de criticar la microagresión, no el microagresor. En lugar de ser acusatorio, explique cómo lo hizo sentir la declaración o el comportamiento y, con suerte, esto ayudará al agresor a comprender el resultado de sus acciones o comentarios y no repetir este error en el futuro.
Tenga en cuenta que, si elige responder, el infractor puede volver con algún tipo de objeción, como:
- “Me malentendiste. Eso no es lo que quise decir.”
- “Estaba bromeando”.
- “Caray, relájate”.
No tiene sentido tratar de demostrar que tenían malas intenciones, simplemente elija su táctica de respuesta anterior y nuevamente, hable sobre por qué le molestó.
Estrategia 3: hable con aliados y elija el autocuidado
Encuentre apoyo entre aliados para discutir experiencias comunes. Aumente la conciencia compartiendo las historias de sus comunidades y actúe para crear un cambio con un diálogo estratégico sobre las microagresiones. Proteja su felicidad y practique el cuidado personal manteniéndose saludable, tanto física como mentalmente.
Cuando el comportamiento es persistente o no está seguro de cómo responder, puede ser útil hablar con un gerente o representante de recursos humanos para informarles sobre el comportamiento inapropiado que ocurre en el lugar de trabajo.
En última instancia, depende de cada individuo cómo responder de la manera más auténtica a quiénes son y cómo quieren ser percibidos.
El respeto requiere un poco de esfuerzo. A veces significa pensar cuidadosamente antes de actuar o hablar. Además, trate de considerar cómo alguien podría interpretar el comentario o la acción y cómo alguien podría sentirse después de que usted lo diga o lo haga. Si cree que puede haber un problema potencial con algo que dice o hace, entonces tome una decisión diferente. Al hacerlo, prevenimos una posible microagresión y la reemplazamos con una microinclusión.